Amigo de la calle

Quien no se ha cruzado con estos niños que abundan en las calles del Perú, aquellos que trabajan para lograr subsistir en un mundo que no les pertenece y que se encuentra a millones de kilómetros del suyo, su mundo infantil.

Pero cual es la culpa que que tienen que pagar estos niños a los que se les tacho de su agenda cronológica la privilegiada parte de vivir su infancia como tal y estudiar con las comodidades que todo ser humano merece.

Peor aun, a falta de ello, en un lamentable acto hoy vemos en los transportes públicos un niño que nos canta sus penas mientras otro baila pisando su vergüenza y quizá también su orgullo, por hacer lo que niños de su "clase" -a la cual maquinalmente ignoramos y hasta marginamos- solo hacen.

Pero que tanto podrá dolerle esos tímidos zapateos a su orgullo comparándolo con el golpe de indiferencia que todos les damos cuando este pasa a cobrarnos el precio de su vergüenza, el cual generosamente nos lo deja a nuestro avaro criterio.

Este post esta dedicado al niño de la calle, del cual debemos rescatar sus ganas de surgir; Y debemos comprender que mientras el gobierno no haga nada por ellos, nosotros siempre tendremos sus monedas y nuestro amor para entregarles dejando de lado reacciones estúpidas narradas lineas arriba.

Con esto quiero hacer comprender en todos los sectores del Perú que ni la hombría ni el placer ni la aventura terminan en la cama, sino firmando, cuidando y manteniendo las consecuencias.



12 de junio
Día contra el trabajo infantil


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